jueves, 12 de junio de 2014

Kate y Leopold

Kate (Meg Ryan) una mujer de estos tiempos, modernísima, vive apurada, tiene su propio departamento, trabaja en publicidad creando anuncios para vender productos.   Y en lo único que piensa es en un posible ascenso en la empresa.  

Acaba de terminar una relación sentimental con su vecino Stuart, estuvieron cuatro años juntos pero la relación no funciono debido a que él se la pasaba más en las nubes que en la tierra era científico y quería probar que se podía viajar en el tiempo.
Leopold (Hugh Jackman)  tercer Duque de Albany en 1876 es un joven encantador que se encuentra atrapado por la tradición de su familia de mantener su posición social y ahora vive con su tío que ya no tiene dinero y entonces le dice que la única manera de no perder su prestigio es casándose con una mujer que cuente con una gran fortuna. 

La película empieza cuando Stuart al fin logra realizar su sueño y encuentra un portal hacia el pasado exactamente el día de la inauguración del puente de Brooklyn y el día en que el tío de Leopold había preparado un baile para que dijera el nombre de la que sería su esposa, Leopold que se caracterizaba por ser curioso le gustaba estar al tanto de todo lo relacionado con inventos para el no pasó desapercibido aquel extraño sujeto Stuart que reía y no paraba de tomar fotos con una camarita muy diferentes a las de aquel tiempo,  así que lo siguió Stuart tenía que saltar desde muy alto para poder regresar y Leopold pensó que se iba a suicidar quiso detenerlo y acabaron cayendo los dos.  
Luego Leopold despierta en el departamento de Stuart este le explica que paso y a Leopold le cuesta un poco tomar conciencia pero al ver como todo ha cambiado, los nuevos edificios, la televisión, el teléfono, acaba por creerle,  Stuart sufre un accidente en el elevador se cae y pasa un largo tiempo en el hospital llama por teléfono a kate para explicarle la situación de Leopold pero ella no le cree.  Pero el hermano de Kate que vivía por temporadas con ella porque seguía su sueño de ser actor pero no lo contrataban llego y conoció a Leopold y al pensar que era un actor muy consagrado y que mantenía su papel todo el tiempo a parte de admirarlo le cayó muy bien lo invita a cenar a Kate no le hace gracia pero terminan comiendo los tres, el mira la comida y no le gusta y le dice que pasen el siguiente plato y cuando le dicen que eso es todo se asombra y dice: "de donde yo vengo, la comida es el resultado de la reflexión y el estudio. Se dice que si no fuera por las artes culinarias, la crudeza de la realidad resultaría insoportable". Cuando Kate se levantaba él también se levantaba y ella le pregunta por qué haces eso y él le dice acostumbro ponerme de pie cuando una dama se levanta, Kate tiene que darse cuenta de que él es demasiado cortes, elegante, honrado y correcto  para estos tiempos y un día hasta le pregunta si es real.  

Kate lo lleva a su trabajo para que haga un comercial de mantequilla para untar en el pan y es muy aceptado por el público femenino además de ser guapo con sus ropas de Duque se ve encantador es todo un éxito Kate está feliz pero al probar la mantequilla él se molesta le dice que el sabor es asqueroso, Kate le dice que a quien le importa que lo importante es hacer que la gente la compre tengo que pagar deudas,  a veces hay que hacer cosas que no te gustan, estoy muy cansada,  él le dice que no es correcto engañar a las personas hay que tener integridad,  empiezan a tener problemas porque los valores y costumbres de las diferentes épocas son muy distintos, Leopold piensa que no todo debe de ser obligaciones sino también darse gustos y tener una vida más lenta,  cuando él se entera de que ella va a ir sola a cenar con su jefe se aparecen con el hermano en el comedor porque el hermano ya se había dado cuenta de que Leopold se estaba enamorando de Kate, él desenmascara al tipo porque en un rato dice un montón de mentiras que habla francés, comenta cosas que no sabe y leopold le dice que es un falso y  que por su calidad de jefe quiere aprovecharse de su empleada solo porque ella necesita un ascenso.  Kate  que si necesita el ascenso se molesta con Leopold y este para contentarla le prepara una cena soñada en la terraza de los departamentos, flores, luces especiales y hasta contrata una persona para que toque violín, bailan y Kate le cuenta que su mamá a diferencia de ella era muy romántica que hasta había hecho fiesta cuando se casó la princesa Diana con el príncipe Carlos, Leopold  le dice que no sabe quiénes son ellos y ella dice no importa es solo un cuento con moraleja, que enseña que no existen los cuentos de Hadas, él es todo gentileza, dice: que dulce parece tu rostro envuelto en la tenue luz de la luna. Le cuenta a Kate que el día que la conoció iba a casarse por conveniencia pero el matrimonio es una promesa de amor eterno, un hombre de honor, no puede prometer eternamente algo que no siente.
 Kate no está segura de lo que siente y además está muy pendiente de su ascenso en el trabajo, Leopold está muy triste porque piensa que ella no comparte el amor que él está ya seguro de sentir por ella y cuando Stuart regresa al departamento lo regresa a su tiempo al momento del baile, mientras Kate logra conseguir el deseado puesto en el trabajo, Stuart viendo las fotos de su viaje al pasado descubre una en que aparece kate en el baile y entonces corre junto con el hermano a decirle que tenía que ir junto a Leopold tal vez desde un principio ustedes tenían que estar juntos yo solo estuve contigo para que pudieran conocerse, Kate empieza a recordar toda la dulzura y delicadezas que tenía el con ella le dijo que los hombres tenían que complacer a las mujeres no hostigarlas ella se da cuenta que en realidad lo que más desea es estar con él.
Se da cuenta que lo que creía que quería no era lo que quería, que lo que más quería era que realmente la amaran.  Se despide de su hermano y da el salto hacia el amor llega al baile justo cuando todos esperaban oír el nombre de la futura Duquesa cuando él la ve dice que ella será su esposa se besan y allí termina.
Los buenos sentimientos como el respeto, la cortesía, la delicadeza al tratarse unos a otros, no deberían de estar desapareciendo pero lo bueno es que el amor puede hacerlos renacer de forma natural cuando es un amor sincero

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